Nacida en Buffalo, Kansas,
Bárbara Morgan se mudó con su familia a California poco después de su
nacimiento. Allí estudió pintura y grabado en la misma Universidad, donde más
tarde ella enseñaría diseño, grabado en madera y pintura durante cinco años
después de graduarse en 1923. En 1925 ayudó a Edward Weston a instalar una
exposición de su trabajo en la galería de UCLA y eso la marco profundamente ya
que las imágenes del fotógrafo supusieron un nuevo reto para añadir a las otras disciplinas de la artista. Ese mismo año, se casó con William Morgan,
editor y fotógrafo, con quien tuvo dos hijos. Después de mudarse a la ciudad de
Nueva York en 1930 centró todo su trabajo en la pintura hasta que cinco años
más tarde tras el nacimiento de su hijo, comenzó a practicar y a buscar nuevas técnicas de fotografía, explorando el medio y
experimentando con diferentes técnicas de iluminación e impresión.
Tras asistir a una
representación de Marta Graham, una joven bailarina que empezaba a destacar en
el mundo de la danza moderna, Bárbara
Morgan quedo tan impresionada que al terminar la función se fue directamente a
hablar con la bailarina y ese mismo día las dos establecieron un acuerdo de
colaboración para trabajar de modo conjunto. Morgan comenzó a fotografiar a
Graham y a su compañía de danza de forma controlada entre las paredes de su
estudio donde cada cuadro era meticulosamente diseñado para capturar el momento
más profundo y más crucial de la danza. Como resultado en 1941 se publicó un
libro, el primero de Morgan, llamado “Marta Graham: Sixteen Dances in Photos.
La colaboración entre las
dos mujeres continuo a lo largo de varios años. Martha Graham: Letter to the
World, también llamada The Kick, fue
creada en 1940 con una cámara Speed Graphic
de 4x5. La fotógrafa requirió a Graham repetir una secuencia de patadas
durante horas hasta que Morgan decidió que había capturado la imagen que
quería. El movimiento representado es parte del ballet dramático de Graham "Letter
to the World," basado en la vida amorosa de la poetisa estadounidense
Emily Dickinson. Más tarde, en 1982 Morgan explicaría en una entrevista para "By
Request", que sintió la necesidad de liberar a la figura dentro del
espacio. Para ello situó a cuatro asistentes, cada uno de ellos con un foco,
unidos entre sí, alrededor de la bailarina, haciendo que se disparasen de forma
simultanea aproximadamente a 1/600 de segundo igualando la velocidad de
obturación y la rapidez del movimiento de Graham. El resultado fue un fondo
ligeramente borroso dando mayor protagonismo a la figura de la bailarina. Sin
duda de todas las imágenes de Bárbara Morgan, esa es la más difundida y más
conocida a nivel mundial.
Una década más tarde se
publicó “Los niños de verano: Un ciclo fotográfico de la vida en el campo (1951)”.
A partir de 1967 y tras la muerte de su
esposo la figura humana dinámica desaparece de las obras realizadas por Morgan,
y son reemplazadas por fotogramas abstractos, fotomontajes e imágenes
paisajísticas que se hacen eco de sus primeros experimentos con las fotografías
y siguen un proceso de inspiración
constructivista rusa de los pasados años treinta.
Junto con Ansel Adams,
Beaumont Newhall, Dorothea Lange, y otros cinco fotógrafos, Morgan será
recordado como cofundadora de la revista Aperture en 1951, una de las pocas
publicaciones de la época creada para fomentar el diálogo entre fotógrafos y
tratar la fotografía como una rama más del arte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario